Puntos clave
- La vida social activa mejora el bienestar emocional en pacientes con demencia y sus cuidadores.
- El aislamiento social duplica el riesgo de ingreso en residencias de ancianos para personas mayores.
- Los grupos de apoyo son una forma efectiva de socializar y buscar consejo para quienes enfrentan la demencia.
- Las relaciones de calidad son fundamentales para mitigar la soledad y sus efectos negativos en la salud.
- El apoyo social adecuado puede ayudar a prevenir problemas de salud como la depresión y enfermedades cardiovasculares.
La Importancia de una Vida Social Activa
Una vida social activa podría aumentar el bienestar en la atención de la demencia, tanto en pacientes como en cuidadores, evitando así el sentimiento de soledad y sus efectos negativos.
Expertos de Harvard y la Universidad de California-San Francisco aconsejan evaluar la soledad de las personas con demencia y de quienes los cuidan. Esto se debe a que el bienestar social disminuye para ambos grupos cuando la enfermedad empeora.
En el estudio, los pacientes con una edad promedio de 80 años perdieron conexiones sociales a medida que su memoria disminuía, lo que dificultaba la conversación y provocaba malestar entre familiares y amigos. A medida que aumentaron sus responsabilidades de cuidado, los cuidadores (que tenían, en promedio, 67 años) se aislaron más.
Impacto de la Soledad en la Salud
Ashwin Kotwal, MD, profesor asistente de medicina en la División de Geriatría de UCSF y primer autor del estudio, comentó: «Las necesidades sociales insatisfechas impactan negativamente la calidad de vida y eso puede conducir a resultados de salud como depresión y enfermedades cardiovasculares, así como al elevado uso de la atención sanitaria y la muerte prematura.»
Según la investigación, las personas mayores que experimentan un mayor aislamiento social tienen el doble de probabilidades de ingresar en residencias de ancianos.
Grupos de Apoyo: Un Espacio de Conexión
Krista Harrison, Ph.D., de la División de Geriatría de UCSF, la iniciativa Global Brain Health y el Instituto Philip R. Lee de Estudios de Políticas de Salud, autor principal del estudio, sugirió que participar en grupos de apoyo, donde los pacientes y los cuidadores se reúnen por separado, puede ser una forma libre de estrés de socializar y buscar consejo.
Además, añadió que «los médicos deberían sugerir coros comunitarios diseñados para pacientes y cuidadores con demencia.»
La Reevaluación de las Relaciones Personales
A medida que la demencia empeora, aún se pueden realizar pasatiempos recreativos. El estudio dirigido por la UCSF examinó parejas casadas con demencia en uno de ellos. Después de enterarse de que su pareja tenía demencia, descubrieron que incluso las parejas que eran extremadamente felices en sus relaciones experimentaban una mayor soledad.
Sin embargo, quienes tenían relaciones de baja calidad no se vieron afectados por la demencia de su pareja, a pesar de experimentar tasas más altas de depresión y soledad en general.
Conclusiones: La Necesidad de la Conexión Social
Ser socialmente activo es esencial para las personas con demencia y quienes las cuidan. Interactuar con los demás y obtener el apoyo adecuado les ayuda a sentirse mejor emocionalmente y más felices en general.